Hoy voy a escribir de esas preguntas que nunca debes hacerle a tu jefe. La semana pasada, una persona de mi equipo me preguntaba si no me importaba que apareciera entrevistada en otro medio, como ejemplo de mujer joven que ya había alcanzado una cierta posición de éxito profesional; si no te importa, me dijo.
Pues te equivocas, contesté. Y casi se atraganta. Te equivocas preguntando a tu jefe por algo que no le incumbe. La proyección pública que un profesional ha de tener es la que el profesional planifique para sí mismo, le expliqué. Como le preguntes a tu jefe qué le parece que aparezcas en un medio de comunicación, vas a acabar preguntándole cuándo le va bien que tengas un hijo y, lo que es peor, él se sentirá con el derecho de opinar.
La única limitación profesional de un trabajador al margen de su empresa ha de ser la que incurra en la competencia desleal. Todo lo demás es patrimonio del profesional y no debe ser cuestionado por nadie más que por él mismo. Algún día después, le comentaba este tema a un amigo, y conveníamos que hay una carencia en las universidades muy importante: no se enseña a nuestros estudiantes, los profesionales del futuro, a gestionar su carrera profesional, la imagen que de ella proyectan y, por tanto, a crear su marca personal. Que tomen nota los decanos y rectores de las facultades y universidades de España.
¿Y qué pierde una empresa que deja que sus empleados se muestren más allá de sus fronteras? ¿Qué cedo yo en favor de mi subordinada por permitírselo? La respuesta es sencilla: NADA. Las empresas, que son organizaciones humanas, son mejores cuanto mejores son las partes que las componen, es decir, cuanto mejores son sus profesionales.
Y tan solo unos días después, alguien con mucho más conocimiento que yo, resumía, en dos disparos de no más de 140 caracteres, vía Twitter, la misma argumentación. Andrés Pérez Ortega decía, mucho más escueta, directa y sabiamente:
Si tu empresa limita o impide tu imagen pública, te pone en desventaja en el mercado si prescinde de ti.
Y lo explica aún mejor, en sus dos siguientes tuits (atención a los tiempos verbales):
1. Para tu empresa, tu imagen debería tener valor.
2. Para ti, tu imagen tiene valor.
Buen comienzo de semana.
1 Pingback