Todo el mundo entiende que si eres un empresario de éxito mundialmente reconocido, a la pregunta de «si volvieras a tener 30 años hoy, ¿qué volverías a crear?» la respuesta habría de ser algo parecido a «volver a petarlo con…»
Pero Jensen Huang, CEO de Nvidia, nos descoloca (o no). Su respuesta es: «Nadie en su sano juicio lo haría.» Carcajada del entrevistador. Se recoloca: ve que habla en serio.
Esta es su respuesta:
«Yo no lo haría. Yo no lo haría. La razón es muy sencilla. Ignorando la empresa que montaríamos, en primer lugar, no estoy exactamente seguro. La razón por la que no lo haría, y se remonta a por qué es tan difícil, es la construcción de una empresa y la construcción de Nvidia resultó ser un millón de veces más difícil de lo que yo esperaba que fuera, de lo que cualquiera de nosotros esperaba que fuera.
En aquel momento, si nos hubiéramos dado cuenta del dolor y el sufrimiento, de lo vulnerable que te vas a sentir, y de los retos que vas a soportar, la vergüenza y el bochorno, y la lista de todas las cosas que salen mal, no creo que nadie creara una empresa. Nadie en su sano juicio lo haría.
Creo que ese es el superpoder de un empresario. No saben lo difícil que es, y sólo se preguntan lo difícil que puede ser. A día de hoy, engaño a mi cerebro para que piense: «¿Cómo de difícil puede ser? Porque tienes que hacerlo».»
La respuesta de Jensen Huang plantea varias consideraciones profundas acerca de la naturaleza del emprendimiento, la resiliencia, la percepción del fracaso y la búsqueda de propósito:
- ¿Cuál es el verdadero propósito de emprender? Considerando que el éxito y la riqueza no parecen ser suficientes para justificar el camino del emprendimiento, ¿qué impulsa realmente a las personas a asumir tal desafío?
- ¿Cómo afecta el temor al fracaso y la vulnerabilidad a los empresarios? La mención de la vergüenza, el dolor y la sensación de vulnerabilidad sugiere que estos son elementos comunes en la experiencia de emprender. ¿Cómo gestionan los empresarios estos sentimientos? ¿Los ven como obstáculos o como motivaciones?
- ¿Es la ignorancia sobre las dificultades un beneficio o un obstáculo para el éxito? Huang menciona que subestimar la dificultad es una «superpotencia» del emprendedor. ¿Ser consciente de los desafíos desalentaría más a los potenciales empresarios que el enfrentarse a ellos sin conocimiento previo?
- ¿Qué papel juega la resiliencia en el emprendimiento? La capacidad de continuar, aun cuando se es consciente de los desafíos y dificultades, parece ser crítica. ¿Cómo pueden los empresarios cultivar y mantener esa resiliencia?
- ¿El emprendimiento es una búsqueda solitaria? La mención a la soledad sugiere que emprender puede ser un viaje aislante. ¿Cómo pueden los empresarios buscar acompañamiento en este viaje?
- ¿Cómo equilibran los empresarios el riesgo y la pasión? Emprender parece requerir una combinación de pasión ciega y una evaluación realista de los riesgos. ¿Cómo se navega este equilibrio?
Estas preguntas no solo son relevantes para quienes creáis empresa, sino también para aquellos a los que nos permitís que os acompañamos en el viaje.


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